Fitness

Los 10 mandamientos del fitness

Para iniciarte en el fitness lo que de verdad funciona es llevar un estilo de vida acorde a tus objetivos deportivos.

Raúl Notario

7 minutos

Los 10 mandamientos del fitness

En este artículo no te vamos a enumerar las últimas tendencias y novedades en el sector del fitness, te vamos a contar la mejor forma de lograr tus objetivos, el gran secreto de los “cuerpos del verano", el sistema de entrenamiento que más éxitos ha cosechado. Te presentamos el entrenamiento que logrará convertirte en un auténtico hombre o mujer Sport Life: ¡el entrenamiento integral!

Consiste en extender los principios de nuestro entrenamiento a nuestra forma de vida. Resulta mucho más sencillo de lo que imaginas. Basta con cumplir estos 10 “mandamientos".

1. AMARÁS EL DEPORTE SOBRE TODAS LAS COSAS. Ya sabemos que esto lo hemos dicho una y mil veces, pero desde Sport Life nunca nos cansaremos de repetir los innumerables beneficios que conlleva realizar actividad física.

Entre otros muchos, estos son las más importantes: conserva la fuerza, flexibilidad y tono muscular, te ayuda a controlar el aumento de peso, mejora la circulación, disminuye la presión arterial, aumenta la capacidad respiratoria y mejora la oxigenación sanguínea.

Además de facilitar la neurotransmisión de la noradrenalina, serotonina y dopamina, lo que supone una mejora del estado de ánimo. Hay muchas razones  más… ¿pero realmente te hacen falta?

2. SANTIFICARÁS EL DESCANSO. Está demostrado científicamente que el descanso es uno de los elementos más importantes para poder rendir a un nivel óptimo en nuestro día a día y en el deporte.

El sueño es un proceso activo e imprescindible, en el que el cerebro sigue realizando importantes funciones psicológicas y fisiológicas. El descanso durante el sueño hace que nuestro sistema inmunológico se fortalezca.

Mientras dormimos el cuerpo libera una sustancia llamada interleucina, que promueve la producción de anticuerpos y estimula el sistema inmunitario. El sistema circulatorio es otro de los beneficiados. Al descender la presión arterial, el corazón reduce su gasto cardiaco, liberándole de parte del trabajo que hace durante el día.

3. NO CAERÁS EN LA TENTACIÓN DEL DULCE. Una dieta equilibrada incluye evitar azúcares simples y los denominados “bollos" industriales, que contienen una gran cantidad de triglicéridos y grasas saturadas. Este tipo de grasas incrementan el colesterol y promueven la obesidad.

De vez en cuando puedes picar algo, pero evítalo en la medida de lo posible. Cuando te entren ganas de consumir “dulces", prueba a sustituir esos azúcares por una pieza de fruta, más sana y con propiedades nutricionales mucho más positivas para nuestro organismo.

4. NO ROBARÁS TIEMPO A TUS ENTRENAMIENTOS. Sabemos que el estrés del día a día es elevado, pero seguro que siempre podrás sacar tiempo para entrenar de una forma eficaz. Los entrenamientos tipo HIIT o exprés te permiten ponerte al límite y alcanzar tus objetivos físicos sin necesidad de gastar una gran cantidad de tiempo.

Pero hay algo más importante aún: cuando te pongas a entrenar, hazlo de verdad. No pierdas tiempo en leer mensajes de tus amigos o en visitar páginas web. Deja el móvil en la taquilla o en casa y aprovecha bien el poco tiempo que tengas. Además de esto, es importante que te olvides de las charlas interminables en la sala de fitness, rompen el ritmo de tu rutina y en algunos casos son tan largas que incluso los músculos llegan a “enfriarse" causando una situación de riesgo en los sucesivos ejercicios. Después de entrenar o durante la  ducha podrás comentar tus anécdotas sin restar tiempo a tu sesión.

Otra opción que puedes probar es aprovechar los traslados a tu lugar de entrenamiento para calentar. Prueba a ir en bici o corriendo y volver del mismo modo, pero con una intensidad más ligera, para que esto nos sirva de vuelta a la calma.

5. NO PONDRÁS EXCUSAS PARA SER FELIZ. La felicidad es un estado de ánimo que experimentamos cuando creemos haber alcanzado una meta u objetivo. A veces nos ponemos metas muy altas y nos frustramos al no alcanzarlas. Lo más recomendable es ponerte metas pequeñas cuya suma te lleve a la consecución de una más grande, pero sin obsesionarte y lo que es más importante, disfrutando del camino. Y esto es perfectamente aplicable al deporte.

Es importante aprovechar cada momento que te da la vida para disfrutar junto a los tuyos de las aficiones que te gustan y de momentos de ocio y relax. Haz cada día algo que te llene y te haga sonreír. Según Benjamin Franklin, la felicidad humana generalmente no se logra con grandes golpes de suerte, que  ocurren pocas veces, sino con pequeñas cosas que ocurren todos los días.

Busca una pequeña motivación diaria que te empuje y te ayude a afrontar cada día con más fuerza.

STOP EJERCICIO TRIMESTRAL
¿Qué es esto del ejercicio trimestral? Los que hemos trabajado o acudimos habitualmente a una sala de fitness sabemos que el año tiene 4 periodos clave en los que la gente acude de forma masiva al gimnasio, pero solo por un breve espacio de tiempo, unas semanas, un mes, o tal vez dos. Esas fechas son después de  Navidades, antes de Semana Santa y antes y después del verano.

Si perteneces a este grupo, debes saber que además de estar tirando el dinero, estás desaprovechando el  tiempo. Cuando acudimos al gimnasio por primera vez, lo normal es estar muy motivados. Queremos ir todos los días, y si se puede dos veces, ¡mejor! Esto es un error. Al principio, lo mejor es ir paso a paso, logrando mejorar nuestra condición física de una forma paulatina y segura. Con dos veces a la semana es más que suficiente.

Así logramos aumentar nuestra autoconfianza y vamos quemando “etapas" del entrenamiento para ver una evolución positiva. Si no aguantamos más de dos meses en el gym nunca veremos esta progresión y al final terminaremos abandonando.

No te dejes caer en la monotonía y no tengas prisa por usar todas las máquinas de la sala o probar todas las clases colectivas el mismo día. El cuerpo necesita adaptarse a los nuevos estímulos y una vez que lo consiga podrás seguir progresando en tus entrenamientos y objetivos. No te rindas, que con trabajo y constancia los resultados llegarán seguro.

6. MATARÁS…LAS CALORÍAS VACÍAS. Sabemos que, de vez en cuando, todos caemos en la tentación de tomarnos una “copita" en las reuniones de amigos. Como todo en la vida, la moderación es la clave para preservar nuestra salud.

Las cervecitas en el chiringuito de la playa, o una copita de vino durante la cena, siempre sientan bien. De hecho, la cerveza y el vino, además de una ligera cantidad de alcohol, aportan otros nutrientes a nuestro organismo. Sin embargo, las denominadas bebidas espirituosas, no aportan nada, salvo calorías. En concreto, 7 kcal por gramo.

La próxima vez que estés a punto de pedirte otra copa, acuérdate de esto y tal vez te decidas por un refresco o una bebida sin azúcar. No tires por la borda una dieta equilibrada y el esfuerzo de tus entrenamientos durante la semana por un par de copas.

7. NO DESPERDICIARÁS LA OPORTUNIDAD DE MOVERTE. Olvídate del ascensor, escaleras mecánicas, etc. Debes saber que subir escaleras es un gran trabajo para tus glúteos y cuádriceps, además de ser también un
gran entrenamiento para tu corazón y capacidad cardiorrespiratoria. Evita coger el coche en la medida de lo posible.

No duermas justo después de comer o cenar. Deja que pasen al menos 2 horas y mientras puedes hacer alguna actividad relajada para evitar que esa energía consumida quede en desuso y se sume al tejido adiposo. No estamos diciendo que elimines las maravillosas siestas, pero antes de tumbarte, prueba a dar un paseo o bien aprovecha para hacer las tareas de la casa o salir a pasear al perro, ¡lo que sea! Pero muévete.

8. NO ENVIDIARÁS CUERPOS AJENOS. Actualmente en la sociedad hay un canon de belleza bastante marcado,  tanto para hombres como para mujeres. Lo cierto es que estos cánones en muchas ocasiones están fuera del alcance de la mayoría de los mortales. Piensa que entrenar para buscar únicamente un bien estético no te  llevará a ninguna parte, incluso puede poner en peligro tu salud. Evidentemente, cuando te sometes a un plan  de entrenamiento y llevas una dieta equilibrada, tu cuerpo se ve sometido a cambios, en algunos casos esos cambios se acercarán a lo que hoy en día denominamos “buen cuerpo" y en otros no. Lo más importante es sentirnos bien con nosotros mismos y sobre todo, ¡encontrarnos sanos, ágiles y fuertes!

9. ELEGIRÁS BIEN TUS ALIMENTOS. Haz 5 comidas al día. Es conveniente tomar algún tipo de alimento cada 3 horas y de ese modo no llegar con un hambre “voraz" a las principales comidas del día. Otro aspecto importante es seleccionar bien los alimentos. Deja de lado la comida rápida. Este tipo de alimentos contiene una cantidad elevada de grasas y productos no demasiado recomendables para la salud.

No digo que no comas hamburguesas o una pizza, ¿a quién no le gusta un capricho de vez en cuando? Pero… ¿Por qué no hacerlos en casa? Más sano, equilibrado y a vuestro gusto. Pequeños grandes cambios que hacen que nuestro estilo de vida sea más saludable.

10. EQUILIBRARÁS TU GASTO Y CONSUMO CALÓRICO DIARIOS. Seguro que alguna vez has terminado de
comer o cenar y has pensado “no puedo más". Esta sensación hay que desterrarla por completo. Es mejor terminar de comer con la sensación de poder comer más y al cabo de unas horas volver a tomar algo para lograr que la ingesta de calorías sea más proporcionada y que vaya equiparada a nuestro gasto calórico.

STOP DIETAS MILAGRO
La operación biquini no funciona. Como siempre decimos en Sport Life, los cuerpos de verano se fabrican durante todo el año. Debéis saber que las dietas que prometen bajar nuestro peso con cifras demasiado optimistas no aportarán nada positivo a nuestra salud, sino más bien todo lo contrario.

Bajar más de 6 kg en un mes puede resultar arriesgado y probablemente causará el temido efecto rebote. Cuando nuestro cuerpo se ve desnutrido y no recibe la cantidad necesaria de hidratos, proteínas, vitaminas y grasas entra en “modo de reserva", ahorrando energía para poder mantener nuestras funciones vitales. Al recibir de nuevo esos nutrientes, los almacenamos en forma de grasa y de ese modo volvemos a ver incrementado nuestro peso. Lo mejor es llevar una dieta equilibrada y sana durante todo el año, acompañada de ejercicio y hábitos de vida saludables.