Ciclismo

Las mountain bikes son para el verano

Siete técnicas para mejorar a tope sin acalorarte

Juanma Montero

3 minutos

Las mountain bikes son para el verano

Aplicando algunos consejos en las subidas empinadas lograrás el doble objetivo a conseguir en las cuestas: no perder tracción y a la vez que la rueda delantera mantenga el contacto con el suelo.

Has de llevar un pedaleo constante, sin tirones, con una cadencia media-alta para darle continuidad al movimiento de piernas, que ha de ser homogéneo. Fundamental colocar el peso adelantado, sentado sobre la punta del sillín.

  • Elegir la marcha correcta. Te ha de permitir mantener entre 60 y 90 rpm de cadencia de pedaleo.
  • Movimiento continuo.
  • Peso avanzado.
  • En subidas largas, cada 5 minutos ponte en pie y haz de 15 a 20 giros completos de los pedales en pie sobre el sillín. Te aliviará la presión sobre los glúteos y darás respiro a la zona lumbar.

NO te pongas en pie si la pendiente es muy fuerte y el terreno está suelto, perderás agarre de la rueda trasera y tendrás que parar.

Cuando la subida se complica tenemos que esforzarnos por mantener la trayectoria óptima, conservando al máximo la inercia, que nos ayuda a superar los obstáculos. Hay que anticipar los baches, sin dejar que las ruedas se claven en los escalones, adaptando nuestros movimientos y cambiando el peso.

  • Traza mentalmente el recorrido menos accidentado
  • Levanta ligeramente la delantera cuando va a llegar al bache.
  • Cuando se acerca la trasera quita el peso del sillín para que pase rodando sin atrancarse
  • No bloquees los brazos, déjale a la bici cierta libertad de movimiento.

NO dejes el trasero pegado al sillín constantemente, el primer escalón te desmontará.

Lo primero es elegir la trayectoria, en muchos casos habrá dos o más opciones (por el interior, por el exterior, combinando interior al principio con exterior al final... )

  • Antes de llegar baja una marcha.
  • Deja el culo pegado al asiento.
  • En el ápice de la curva has de pedalear con fuerza para evitar bloquearte.
  • Si tienes buen control de tu bici puedes levantar ligeramente la delantera para ganar tracción sobre la trasera con el desplazamiento del peso.

Mirar bien, colocarse en la posición correcta y no tensarse son tres de las claves esenciales para bajar por una zona rápida con piedras.

  • Haz un rápido escaneo visual para elegir la trayectoria más lisa y con menos obstáculos.
  • Usa el plato grande, absorbe más cantidad de cadena y hace que ésta golpee menos el cuadro.
  • Coloca el cuerpo ligeramente atrasado, pero no en exceso.
  • Los frenos controlan la velocidad pero no te detienen en seco, lleva uno o dos dedos sobre las manetas para disminuir el tiempo de reacción.
  • Los brazos actúan como amortiguadores.
  • Adapta tu trazada al terreno. A veces tendrás que mover el cuerpo lateralmente para que la bici pise por la zona ideal

NO te quedes rígido con los codos extendidos porque estarías perdiendo la capacidad natural de amortiguación de los brazos y además de lesionarte controlarías peor la bicicleta.

Con una buena posición y controlando la frenada podrás hacer la mayor parte de las bajadas por mucha pendiente que tengan. Por si acaso primero cerciórate de que el terreno no está muy suelto, y si es así, tienes pista libre.

  • Atrasa las caderas cuando el terreno empiece a inclinarse hacia abajo, no antes de tiempo.
  • Separa las rodillas para que te puedas mover adelante y atrás sin engancharte con el sillín
  • Lleva siempre uno o dos dedos en cada palanca de freno. Controla la velocidad con una resión muy ligera sobre el delantero y una presión más firme en el trasero, que es el que podrás accionar con más fuerza.
  • Los pedales van con las bielas horizontales
  • Tu cuerpo se ha de atrasar más o menos en función de la pendiente, no te quedes "congelado" y muévete si el terreno cambia de inclinación.

La curva te va a acelerar al ser en descenso así que tienes que llegar con una velocidad no demasiado alta para evitar salirte de la trazada.

  • La mirada busca el interior de la curva para ver por dónde puedes pasar
  • Al entrar en la curva, lleva más peso en la rueda delantera para evitar pérdidas de adherencia, hazlo aproximando el torso al manillar.
  • Dosifica bien la frenada, con más fuerza en la rueda trasera que en la delantera, que has de tratar con delicadeza.
  • Presiona sobre el pedal exterior para mejorar la adherencia de las ruedas
  • Desplaza el peso atrás al salir de la curva para mejorar la tracción al iniciar el pedaleo con fuerza.

NO muevas el peso mucho hacia delante porque tienes riesgo de pivotar sobre la rueda delantera y volcar.

Antes de que un bache te haga volar por los aires sin control debes anticiparte tú para saltártelo de forma controlada.

  • Antes del bache flexiona los codos y baja el cuerpo. Estás preparando la extensión y tirón del manillar posterior.
  • Tira del manillar hacia arriba y atrás dejándote impulsar por el bache.
  • Desplaza el peso adelante para ir preparando el aterrizaje.
  • Aterriza con la rueda delantera, al ser cuesta abajo mantendrás mejor el control que si cayeras con la trasera primero.
  • Amortigua el salto flexionando brazos y piernas.