- Afloja ligeramente la presión sobre los pedales. para cambiar, justo en el instante en que accionas el mando del cambio, pero sin dejar de pedalear.
- Anticipa el cambio justo antes de las subidas lentas y muy fuertes, porque al dejar de pedalear para cambiar podrías perder la escasa velocidad que llevas.
- Es preferible pecar de una cadencia alta antes que baja. Una relación de cambio muy dura es poco eficiente, antieconómica y somete a tus articulaciones a un trabajo extra. Una cadencia alta con una marcha suave incide más en un trabajo muscular y respiratorio, sin sobrecargar tendones y articulaciones y mejora tu técnica de pedaleo.
- Usa sólo combinaciones de marcha en las que la cadena no se cruce. Ésta ha de mantenerse lo más paralela posible al eje longitudinal de la bicicleta, y si combinamos, por ejemplo, plato pequeño (el más interno) con piñón pequeño (el más externo) la cadena traza una diagonal y trabaja torcida, se gasta antes y gasta más toda la trasmisión.
Combina el plato pequeño sólo con las tres o cuatro coronas más grandes y el plato grande con las tres o cuatro más pequeñas. El plato medio lo podemos usar con todas las coronas, aunque es preferible no combinarlo con la primera ni con la última.