Esta sociedad está enferma. Sólo reconociéndolo así de claro nos pondremos en el camino de acabar de una vez por todas con ese cáncer de la violencia de género que nos avergüenza a todos. A los que amamos el deporte nos ha dolido en el alma el asesinato de Laura Luelmo, la profesora zamorana que fue atacada salvajemente en la población onubense de El Campillo mientras disfrutaba de su pasión por correr.
Ha ocurrido justo unos días después que EDP, la empresa eléctrica que tanto está haciendo por el mundo del running, presentara su nuevo proyecto “Sincronizadas" que, siguiendo el éxito que tuvo su proyecto de unir personas con discapacidad visual con futuros guías para salir a correr, busca juntar a chicas para que puedan salir a correr juntas. Además de la motivación de entrenar en equipo, aumentar la seguridad al ir en grupo es uno de los objetivos www.sincronizadas.com
Eso sí, hay que gritar a los cuatro vientos que no hay derecho que en esta sociedad tan del siglo XXI de la que presumimos una mujer tenga que pensar por dónde y a qué hora va a salir a correr. Porque todos y todas nos merecemos esa libertad que sentimos cuando salimos a correr y sólo oímos nuestras zancadas y nos sentimos vivos con nuestro corazón latiendo feliz. No podemos quedarnos en pedir prudencia, hay que ir a la raíz del problema. La solución no puede estar en ir con un amigo o quedarte en casa. Porque no debemos parar hasta conseguir que nunca más alguien tenga que correr por miedo.