En la historia de la nueva 1500 de New Balance tiene mucho que ver el ganador de la última edición del Ironman de Hawaii Sebastian Kienle. El triatleta alemán de 30 años, que en 2012 y en 2013 había logrado el título de campeón del mundo en la distancia de Medio Ironman, a la hora de diseñar junto a los ingenieros de New Balance la nueva zapatilla voladora de la marca les pidió expresamente que en la media suela necesitaba un elemento de estabilidad. “No soy pronador, pero si miras mi pasada cuando estoy en la segunda parte del maratón del Ironman voy pronando totalmente". El resultado ha sido espectacular. No sólo es la zapatilla con la que el ganador del Ironman afronta con garantías un maratón después de 3’8 km de nado y 180 km de bici sin poder ir a rueda, la 1500 es una zapatilla espectacular para correr muy rápido carreras de 10 km hasta el maratón para los corredores populares. Ligera (196 gramos), muy reactiva pero con un elemento de soporte que protege tu musculatura.
La clave es la mediasuela, en la que se combina la ligereza y la reactividad del REVlite con un combinado de una pieza de alta densidad (que te da estabilidad) con un el T-BEAM que ofrece mayor rigidez torsional a la zapatilla en la zona media de apoyo. Además, la geometría de la zapatilla se ha diseñado para optimizar las zonas de impacto.
La 1500, que tiene un drop de 6 mm, tiene un upper que abraza con consistencia el empeine (un punto débil de muchas zapatillas voladoras), gracias a una malla de aire transpirable y capas superpuestas soldadas y sin costuras en el área del empeine que envuelven la parte media del pie. Siempre es difícil conseguir el equilibrio entre sujeción y ligereza y la 1500 lo logra.
La guinda de una excelente zapatilla es la suela, de caucho de carbono y doble densidad. El resultado es una zapatilla que lo tiene todo para convertirse en otra de las míticas de New Balance. Una zapatilla ligera, con una transición de pisada suave e increíblemente reactiva, pero con un aporte extra de estabilidad. El precio además es muy competitivo: 100 euros.
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La nueva 1500 de New Balance, menos de 200 gramos y con un extra de estabilidad
En la historia de la nueva 1500 de New Balance tiene mucho que ver el ganador de la última edición del Ironman de Hawaii Sebastian Kienle. El triatleta alemán de 30 años, que en 2012 y en 2013 había logrado el título de campeón del mundo en la distancia de Medio Ironman, a la hora de diseñar junto a los ingenieros de New Balance la nueva zapatilla voladora de la marca les pidió expresamente que en la media suela necesitaba un elemento de estabilidad. “No soy pronador, pero si miras mi pasada cuando estoy en la segunda parte del maratón del Ironman voy pronando totalmente". El resultado ha sido espectacular. No sólo es la zapatilla con la que el ganador del Ironman afronta con garantías un maratón después de 3’8 km de nado y 180 km de bici sin poder ir a rueda, la 1500 es una zapatilla espectacular para correr muy rápido carreras de 10 km hasta el maratón para los corredores populares. Ligera (196 gramos), muy reactiva pero con un elemento de soporte que protege tu musculatura.
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