Es una de las marcas que más está creciendo entre los corredores populares, especialmente en Estados Unidos donde se ha hecho un hueco en el mercado especialmente por la comodidad que aportan al correr y además con una gran ligereza. Su objetivo era combinar la protección que da una zapatilla de entrenamiento con la reactividad y la ligereza de una de competición. El secreto de esta marca suiza son “nubes”, unos tacos ahuecados que se contraen durante la fase de impacto de la pisada para amortiguar y luego se cierran para asegurar una pisada firme y reactiva.
On Running ha anunciado ahora la nueva Cloudflyer que destaca por lo que ellos llaman el ‘túnel de estabilidad’, incluido en la mediasuela para dar estabilidad y confort. Además, se ha modificado el talón de la zapatilla que va con una espuma especial que ofrece un ajuste firme al tobillo en el momento de impactar con el suelo. Para potenciar el efecto de máxima amortiguación lleva plantilla de doble densidad. El peso es de 225 gramos.