Iniciarse en el snowboard es francamente divertido, pero hay ocasiones en que tu perfecto día de nieve puede convertirse en una auténtica pesadilla si desconoces detalles que son básicos para el buen funcionamiento de ésta actividad.
Me gustaría centrarme en una serie de conceptos básicos que son los que habitualmente dan más quebraderos de cabeza a los principiantes –y no tan principiantes- en el mundo de la tabla. También vamos a descartar algunos vicios que se adquieren de forma inconsciente y que imposibilitan que puedas evolucionar adecuadamente con la tabla. Lo mejor es ponerles freno antes de que te vayas de viaje a tu estación de esquí favorita.
→ Atento a tus botas
En mi opinión, las botas son el elemento más importante del material, por delante incluso de la tabla y de las fijaciones. Unas botas de mala calidad que no aíslen del frío y el agua como debieran te garantizan que comiences a odiar este deporte. No hay cosa peor que sentir los pies calados cuando estás en la nieve con un frío que pela. Si vas a alquilar material de snowboard para tu primera vez, revisa que las botas estén en buen estado y no está de más que preguntes por el modelo y marca para tener algo de información extra.
La talla es otro de los problemas, hay que tomarse tiempo en decidir la talla de la bota y no hagas mucho caso al número de pie que tienes en tus zapatillas de deporte, ya que dependiendo de la marca cambiará notablemente. El dolor que provoca una bota de talla pequeña mal seleccionada hará que acabes en la cafetería esperando a tus amigos. Por el contrario, una bota que te quede grande aumenta el riesgo de lesión. Para saber elegir tu talla adecuada presta atención a los siguientes puntos:
- En la tienda, ajusta y ata la bota como si fueras a calzarte la tabla y camina con ella para experimentar sensaciones. El dedo gordo del pie debería tocar la punta del botín interior pudiendo moverlo. Si te aprieta, pide medio número más hasta que des con la talla correcta. Piensa que la bota cederá y ganará un poco de talla después de varios usos, con lo que si crees que te queda "justa" pero sin molestias quizás sea tu talla.
- Con la bota atada prueba a flexionar las rodillas con la planta del pie apoyada al completo y sin despegar el talón. Si al flexionar se mueve o se levanta el talón dentro de la bota, definitivamente necesitas una talla menor. El pie debe estar completamente sujeto cuando estés flexionando sin moverse dentro de la bota.
- Por último, una vez que ya tengas tus botas y estés a punto de ponerte la tabla, átalas con firmeza pero no te pases. Es tan contraproducente atar las botas al máximo como dejarlas flojas.
→ Mira qué te pones
Uno de los errores más comunes es ir equipado con ropa de abrigo no adecuada. Lo más importante que debes saber es que para los deportes de invierno hay que ir vestido por capas, como una cebolla. De este modo, podrás prescindir de una capa en caso de exceso de temperatura. En caso contrario, puedes saturar de sudor el abrigo si sólo llevas una capa y quedarte congelado en cuanto te quedes parado. Y al revés, podrás congelarte de frío en caso que no estés muy abrigado si tu estupendo día soleado cambia drásticamente a peor como puede ocurrir en la montaña.
Elige una primera capa compuesta de una camiseta térmica que transpire y mantenga la temperatura de nuestro torso. A continuación una segunda capa que puede ser una sudadera fina, forro polar o similar y, por último, la chaqueta.
→ Enmascarado
Te recomiendo que uses máscara de ventisca en lugar de gafas de sol, ya que ante una caída puedes lesionarte con los cristales y la montura dura. Presta atención a dos puntos en concreto, la zona de ventilación situada en la parte posterior (cejas) e inferior (pómulos) de la máscara que debe estar siempre sin obstruir, y por otro lado, la lente. A la hora de limpiar la lente vigila que no haya elementos que puedan rayarla y usa la propia funda o un trapo suave.
¡Se me congelan los dedos! |
Algo tan sencillo como aflojar las cinchas de la fijación delantera cuando subes en el telesilla o en un telearrastre eliminará la sensación de dedos congelados que muchos de vosotros notáis sin saber por qué ocurre. Cuando nos subimos en la tabla nos atamos con fuerza las fijaciones pero cuando subimos en un remonte se nos olvida aflojar la fijación delantera –mientras tenemos el pie de atrás libre- disminuyendo el riego sanguíneo en un momento de reposo por la presión que ejercen las cinchas.
|
Mirada al frente |
Deja de agachar tu cabeza mirando la parte delantera de tu tabla a medida que te deslizas ya que esto dificultará enormemente tu siguiente giro o movimiento. Éste es uno de los vicios más comunes. Mantén siempre tu mirada unos metros adelante en la dirección que te diriges y mira al lugar donde quieres ir con tu tabla. Te asombrará el cambio que experimentarás con éste simple ejercicio.
|
Hombros sin contrarrotación |
Otro de los vicios más comunes y que más perjudican tu evolución es llevar los hombros contrarrotados con respecto a tu tren inferior. Para comprender esto mejor, piensa que la posición del tronco en el snowboard es lateral y la cabeza es la que mira hacia delante. Para que lo comprendas, puedes ver como es la posición en el esquí que consiste en llevar el tronco completamente de frente orientado a la pista. Por un gesto natural, cuando practicamos snowboard tendemos a rotar nuestros hombros en la dirección en la que nos dirigimos (como en el esquí) porque nos transmite falsamente más seguridad. Esto es un error, los hombros deben apuntar en la dirección de las puntas de los pies. Es la cabeza la que se gira en la dirección a la que nos dirigimos. Grábate en video para que seas consciente de si cometes este error y ve corrigiéndolo poco a poco.
|
Peso delante vs Peso detrás |
Uno de los "miedos top 10 del snowboard" es intentar poner el peso en nuestra pierna delantera cuando estamos en una pendiente, más conocido como miedo a la máxima pendiente. Es importante controlar el traspaso de pesos entre tus pies para aprender a realizar virajes colocando el peso sobre nuestro pie delantero. De este modo, liberamos peso en la parte trasera de la tabla, lo que facilita el viraje o para hacer maniobras de freestyle. Tendemos a engañarnos inclinando el tronco cuando queremos poner el peso delante y en realidad dejamos el peso fijado en el pie trasero. Te recomiendo igualmente que te grabes e identifiques el error. Para corregirlo escoge pendientes suaves para practicar el traspaso del peso y coge confianza poco a poco.
|