Estreñimiento:
Los problemas de estreñimiento no se deben solucionar con laxantes u otros medicamentos porque son un problema de malos hábitos, tanto en la alimentación como en la costumbre de ir al baño. Nada es magia, para el estreñimiento la clave es ser constante y educar al intestino a ir al baño con regularidad, cada día a la misma hora. El uso indiscriminado de laxantes suaves vuelve ‘vago’ al intestino y agudiza el estreñimiento, y mejor no utilizar los laxantes fuertes por sus graves efectos secundarios.
Remedios naturales:
Este problema reacciona muy bien a una alimentación sana específica para cuidar la flora bacteriana con alimentos pre y pro bióticos como los yogures naturales, la fibra propia de los alimentos vegetales (frutas, cereales y verduras) y los alimentos fermentados (chucrut, tempeh, kefir, encurtidos japoneses, etc.) En el caso de estreñimiento, hay muchos remedios, desde el tradicional ibérico de tomar una cucharada de aceite de oliva virgen extra en ayunas, a beber en ayunas el agua en remojo con semillas de lino o de plantago, ricas en mucílagos. El kiwi y la manzana con piel también son buenos remedios si se toman cada mañana en ayunas con un vaso de agua.
Diarrea:
Los medicamentos antidiarreicos siempre deben ser recetados por el médico, pues su mal uso puede acabar en una infección peor o estreñimiento. La mayoría actúan como ‘tapones’ y si hay infección digestiva, nada peor que taponar el conducto natural por donde se están eliminando los residuos tóxicos, pero sin curar la infección bacteriana o de otro tipo, creas una ‘bomba’.
Remedios naturales:
La prevención es lo mejor, lavarse las manos, evitar tocar comida contaminada, no comer comida en mal estado o de procedencia desconocida en los viajes y beber siempre agua embotellada. Pero aún así, los microorganismos siempre encuentran la forma de llegar a tu intestino y provocar una diarrea. Si esta es leve, sin fiebre y de no más de 2-3 días de evolución se pueden tratar de forma natural cuidando la mucosa digestiva con antiinflamatorios naturales con infusiones de manzanilla, escaramujo o anís verde y repoblando la flora bacteriana perdida con yogur natural sin azúcar. También es muy eficaz beber zumo de limón natural o diluido en agua embotellada por su efecto antiséptico para matar todo tipo de bacterias y virus. La dieta debe ser ligera, y si no hay hambre, basta mantener la hidratación con suero oral y zumos naturales de cítricos diluidos en agua. No está demostrado que el arroz blanco ayude a curar las diarreas, pero si hay apetito, opta por dieta suave: manzanas asadas, plátanos, puré de patata con zanahoria o sopa de pollo.