¿Berenjenas al horno o a la plancha? ¿Cómo las consumimos?

Un alimento sano y delicioso con múltiples posibilidades a la hora de cocinarlo.

Noelia Hontoria

La berenjena está compuesta fundamentalmente por agua, fibra e hidratos de carbono.
La berenjena está compuesta fundamentalmente por agua, fibra e hidratos de carbono.

La berenjena es un alimento de origen vegetal con un alto contenido de agua (92.2 gramos por cada 100 gramos de producto). También encontramos en ella fibra (2.4 gramos) y carbohidratos (3.8 gramos). Además, es muy rica en potasio (262 mg).

Por todo ello, las berenjenas son un alimento más que recomendado para deportistas, pero también para aquellas personas que estén siguiendo una dieta para perder peso o simplemente que quieran cuidarse comiendo sano. Si te has decidido a incluirlas en tu alimentación, probablemente te estés preguntando qué opción es mejor, si las berenjenas al horno o las berenjenas a la plancha.

Berenjenas al horno, la opción más popular

Cuando pensamos en este vegetal, una de las primeras recetas que nos viene a la cabeza es la de las clásicas berenjenas al horno rellenas. Es una receta muy sencilla y una forma deliciosa de consumirlas. La forma tradicional es vaciándolas y rellenándolas con carne y queso, pero podemos adaptarlas a nuestra dieta con diferentes combinaciones.

¿Berenjenas al horno o a la plancha? ¿Cómo las consumimos?

Podemos combinar nuestras berenjenas al horno con diferentes alimentos.

El suave sabor de las berenjenas admite casi cualquier ingrediente. Si queremos un menú saludable para deportistas, nos faltaría consumir otros nutrientes. Podemos por tanto rellenar nuestras berenjenas al horno con pollo para obtener más proteínas y añadir pimiento rojo para completar con una fuente de vitamina C.

Además, las berenjenas al horno sin rellenar son muy bajas en calorías.

Berenjenas a la plancha, una alternativa saludable

Si queremos una forma aún más sencilla de prepararlas, podemos optar por esta receta de berenjenas a la plancha:

  1. Empezamos por cocinándolas al vapor y después las marcamos en una plancha. Para ello, las cortamos en dados y las dejamos en remojo durante 30 minutos en agua con sal.
  2. A continuación, las escurrimos, las lavamos y las ponemos al vapor unos 5-6 minutos. Ahora solo tenemos que pasarlas un poco por una plancha o sartén con una pizca de aceite de oliva.
  3. Podemos mezclarlas después con arroz blanco y un salteado de cebolla y setas, o incluso a modo de ensalada de garbanzos con verduras, y nos quedará un plato rico y nutritivo.

La peor manera de consumir las berenjenas

Si quieres probar algo diferente a las berenjenas al horno o a la plancha, es posible que caigas en la tentación de tomarlas fritas. Una receta muy popular en los últimos años son los bastones de berenjenas fritos y regados con miel.

Sin embargo, esta es la peor opción, aparte de la carga calórica que añadimos al incluir la miel, la berenjena absorbe mucho más aceite que otros alimentos, convirtiéndose así en un plato poco saludable aunque se trate de una verdura.

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