“Si quiere un campeón en la familia, entrénese usted….mientras deje que su hijo juegue feliz". Alguien nos envió una foto con este lema a la redacción de Sport Life. Era una pancarta de un club infantil de rugby. Desde que la vi pensé que era el mensaje perfecto para difundir desde Sport Life a los padres/madres deportistas y ahora que empiezan otras veces las ligas escolares y las competiciones infantiles de todos los deportes he querido volver a escribir sobre el tema. Los niños, incluso competiendo, deben jugar a hacer deporte. Lo último que debe ser la actividad deportiva es algo estresante para él. Jugando a hacer deporte se impregnará, sin que se dé cuenta, de los valores de compañerismo, superación, etc. Y esa será la gran victoria porque marcará para siempre y para bien su personalidad.
En la redacción lo hemos hablado muchas veces que casi peor que un niño no encuentre un entorno familiar favorable al deporte es que se encuentre con unos padres locos por el deporte que vuelquen en él las esperanzas de tener un campeón en la familia. Yo que vengo del periodismo ciclista, no puedo deciros las veces que un padre me dijo eso de “tengo un hijo que puede ser el siguiente Indurain". Por supuesto, ninguno cumplió las expectativas, ya que Indurain rompió el molde cuando nació en Villava allá por 1964. Y lo mismo Nadal con el tenis o Pau Gasol con el basket.
En internet puedes encontrar casos ya de denunciar como el de la niña americana, de padres ambos triatletas, que presumían de que la niña había terminado un medio maratón con 6 años. En nuestra opinión, y en la de los médicos que hemos consultado en la redacción de Sport Life, es algo lejos de enseñar a esconder por el daño en la salud actual y futura que puede sufrir “el niño prodigio". Todos en algún momento hemos pensando que nuestro hijo tiene algo especial, pero lo que tiene de especial no es que vaya ser una estrella del deporte sino algo mucho más importante: sencillamente es nuestro hijo.
En mi opinión la mejor satisfacción para un padre, más allá de los trofeos o las medallas que se reúnan en la habitación de su hijo, es comprobar como adquiere del deporte los valores de compromiso, compañerismo, esfuerzo y respeto con sus rivales y tenga para siempre corazón de deportista. Le haya tocado la genética que le haya tocado, porque malo o bueno todos llevamos un deportista dentro.
@franchicosport
Un campeón en la familia
“Si quiere un campeón en la familia, entrénese usted….mientras deje que su hijo juegue feliz". Alguien nos envió una foto con este lema a la redacción de Sport Life. Era una pancarta de un club infantil de rugby. Desde que la vi pensé que era el mensaje perfecto para difundir desde Sport Life a los padres/madres deportistas y ahora que empiezan otras veces las ligas escolares y las competiciones infantiles de todos los deportes he querido volver a escribir sobre el tema. Los niños, incluso competiendo, deben jugar a hacer deporte. Lo último que debe ser la actividad deportiva es algo estresante para él. Jugando a hacer deporte se impregnará, sin que se dé cuenta, de los valores de compañerismo, superación, etc. Y esa será la gran victoria porque marcará para siempre y para bien su personalidad.