¿Funciona tomar leche materna para ganar músculo?

Respondemos a una de las dudas lanzadas por un lector: ¿es efectiva la leche materna para ganar músculo?

Juanma Montero

¿Funciona tomar leche materna para ganar músculo?
¿Funciona tomar leche materna para ganar músculo?

La naturaleza es sabia y si en nuestra especie tomamos leche materna en las primeras etapas de la vida, que es cuando se produce el más espectacular crecimiento muscular, óseo, articular, etc. de todo el ciclo vital, es porque su composición está perfectamente calculada para el desarrollo adecuado de un bebé humano. Lo cierto es que es un alimento muy nutritivo y tan perfecto que es lo único que necesitamos para crecer y desarrollarnos y además tiene grandes virtudes inmunológicas, evitando el riesgo de enfermedades infecciosas como diarrea, otitis, meningitis, neumonía, etc., y disminuyendo el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas en la edad adulta, diabetes, demencia, alergias… Incluso se ha demostrado que los niños que han seguido lactancia materna son más inteligentes y menos propensos a estrés, depresiones o a desarrollar conductas peligrosas.

Nuestra especie no deja de tomar leche al crecer como hacen otros mamíferos. Por simple practicidad, la leche más utilizada es la leche de vaca, pero se pueden encontrar leche y lácteos de leche de cabra, oveja, búfala, y hasta de camella.  La leche materna tiene una composición diferente a la leche de estos herbívoros, es mucho más rica en grasas (un 4,2% de grasas frente al 3,5% de la de vaca) y la grasa está mayoritariamente en forma de triglicéridos y ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga como el ácido docosahexaenoico o DHA, el ácido araquidónico o ARA, los cuales no aparecen en la leche de vaca ni la de cabra y son muy importantes para el desarrollo del sistema nervioso y ocular humano.

La leche humana contiene más hidratos de carbono (9.5 g/100g frente a 4.9 g la de vaca), y mucha menos proteína (1.1 g/100 g sobre 3.5g de la de vaca). Además, la leche materna contiene vitaminas A, C, E y K, minerales, inmunoglobulinas IgA, IgM, IgG, células vivas (leucocitos, macrófagos), enzimas, hormonas, etc. Especialmente en el calostro (leche de los primeros días), pero si no se conserva adecuadamente se pierden. Es una combinación de sustancias que hace de la leche materna una "súperbebida".

En mayo apareció una noticia en el "Washington Post" contando que la leche materna era la nueva bebida para deportistas de alto rendimiento, pero no hablaba de ganar músculo, sólo bebida de recuperación. Y también se está utilizando leche materna para la recuperación de personas con cáncer que siguen un tratamiento de quimioterapia, por sus propiedades reconstituyentes. Quizás por eso en algunos círculos "deportivos" se está empezando a usar leche materna para ganar músculo.

Lo curioso es que no supone ventaja alguna respecto de la leche de vaca en cuestión de ganancia muscular, porque aporta menos proteína y más grasas. Además, se compra a través de dudosos entornos, sin control sanitario estricto, la venta no está regulada por la ley y hasta incluso puede permitir la transmisión de enfermedades como la hepatitis, por la falta de control. Y en algunas muestras de leche materna analizadas se ha encontrado sustancias químicas peligrosas como nicotina, DDT, PCBs, tricoloretileno, percloratos, dibenzofuranos mercurio, plomo, benceno y hasta arsénico. Y es que el tejido mamario es como una esponja, la grasa de la que está relleno absorbe los contaminantes ambientales con facilidad.

Vamos, que si no conoces la fuente de la que proviene la leche materna, mejor no probar a tomarla y dejarla para los bebés que son los que la necesitan de verdad.