Tenemos siempre la más fácil salida de echarle la culpa a los demás, pero la culpa de la que nos pasa generalmente la tenemos nosotros mismos. Y esto también se puede aplicar al mundo del deporte. Nos quejamos de los problemas que tenemos pero poco o nada hacemos para resolverlo mientras que hay otros colectivos que se unen y se movilizan hasta que consiguen arrancar (que en la vida poco se regala) los beneficios que buscan.
Primero fue el teatro, los conciertos, los festivales de música…¡y hasta los toros! que tienen sus entradas al 10% y ahora lo ha logrado el cine. Mientras el deporte popular, ese que les llena la boca que es la medicina del futuro, el de los ahorros en Sanidad, el que tiene llenar de valores nuestra sociedad, sigue al 21%. Los gimnasios, que ahora muchos médicos incluyen en sus recetas a sus pacientes, al 21%. Y lo que ya es directamente una vergüenza es que la inscripción de un evento deportivo popular de niños tenga el 21% de IVA. Y si sigue así es porque directamente los deportistas no echemos nada para que cambie.
Tenemos por primera vez una Secretaria de Estado para el deporte, una gran deportista como la exesquiadora olímpica María José Rienda, pues desde aquí le lanzó este reto: liderar, como máxima representante que es hoy del deporte español, el cambio del IVA para las actividades de promoción del deporte como fuente de salud. A los deportistas los políticos nos toman el pelo directamente porque no nos temen. No nos ven como una posible pérdida de votos que es lo que les mueve. Porque de otra forma no tiene explicación ninguna el cachondeo como la ley justa para la seguridad de los ciclistas en la carretera. Todos están de acuerdo, hacen sus promesas (su especialidad) pero luego son incapaces de poner de acuerdo ni siquiera en este tema con la sangría que tenemos en la carretera con accidentes que deberían ser un punto y aparte como el ocurrido al matrimonio vasco en el Camino de Santiago junto a su hijo que ahora es huérfano por culpa de un conductor borracho que además se dio a la fuga.
Creo que ha llegado el momento en el que los deportistas nos tenemos que poner serios.
Este el texto editorial con el que abrimos la revista de agosto de Sport Life. Si quieres conocer sus principales artículos, pincha aquí