142. Si no tienes bicicleta, regálate una ya mismo. Es una buena inversión porque se trata del vehículo más eficiente, además te permitirá estar en forma sin apenas impacto sobre tus articulaciones.
143. Utiliza la bici o ve andando para hacer los distintos recados por la ciudad.
144. Para aquellos que no se atrevan a andar en bicicleta en ciudad o por carretera por miedo a los coches, sería interesante elegir días festivos a primera hora de la mañana en los que apenas habrá circulación de tráfico rodado.
145. Si no te decides por la utilización de la bicicleta en tus desplazamientos urbanos, tienes la opción de comprarte un patinete y desplazarte por la acera sin peligro de la circulación de los coches.
146. Si no te queda otra que coger el coche para ir a trabajar, déjalo aparcado un poco más lejos y así tanto a la llegada como a la salida activarás tu metabolismo y tendrá el efecto de haber andado más tiempo.
147. Activar el organismo varias veces al día con pequeñas caminatas para desplazarte a tu trabajo hará que estés activo todo el día.
148. No pierdas tiempo esperando el autobús para trayectos urbanos y sal un poco antes para ir andando. Ese poco tiempo que pierdes, lo ahorras con creces de ir al gimnasio para dar pedales sin sentido en una bici estática.
149. En los asientos del transporte público, tensa tus cuádriceps repetidamente para tonificar tus muslos.
150. Cuando estés esperando un semáforo, en un paso de cebra o viendo un escaparate, aprovecha para ponerte de puntillas varias veces seguidas y así favorecer la tonificación y circulación de las piernas.
151. No dejes de andar aunque subas las escaleras mecánicas y trata de subirlas de dos en dos, seguro que dejas a más de uno con la boca abierta y tus piernas te lo agradecerán.
152. Si vas de vacaciones a conocer una ciudad, programa recorridos para verla andando la mayor parte del tiempo posible, ya que no solo disfrutarás más por la ciudad sino que devorarás kilómetros sin percatarte de ello.
153. Si percibes que vas a andar poco estando de vacaciones, intenta incluir una pequeña dosis de ejercicio siempre antes de desayunar, haciendo una pequeña caminata o trote suave seguido de una ducha en la que acabes con agua fría en la zona de tus piernas.
154. Cuando haga frío, no lleves las manos en el abrigo y utiliza guantes para liberar los brazos y así poder hacer un movimiento armónico de los mismos.
155. De vez en cuando lleva un par de botellines de 250 cc en cada mano para favorecer el balanceo de brazos en tus desplazamientos.
156. No te abrigues en exceso cuando salgas fuera de casa, ¡sudar no adelgaza!