Vamos a familiarizarnos con dos posturas, que podemos realizar encadenadas en nuestra práctica de Yoga.
La postura del Triángulo extendido o Utthita Trikonasana implica un estiramiento de la cadera, ingles, isquiotibiales y pantorrilas. Te ayudará a fortalecer los hombre, el pecho y la columna vertebral, además de los muslos, rodillas y tobillos. No realices esta postura si tienes la tensión alta o baja o si tienes dolores de cabeza. Es importante que mantengas los brazos y las piernas rectos. Activa los músculos del pecho y activa los cuádriceps. Es muy importante que mantengas activa la cara posterior de la pierna adelantada para evitar la hiperextensión de la rodilla. Si sientes dolor en cualquier articulación mientras hacer el ejercicio, reajusta la posición.
La Media Luna o Ardha Chandrasana, contribuye a fortalecer las piernas y trabajar el equilibrio, al mismo tiempo que se trabajan los brazos, que junto a las piernas soportan el peso del cuerpo. Es una postura beneficiosa para la espalda, ya que trabajas la flexibilidad y la agilidad. Glúteos y abdominales también se encuentran implicados, favoreciendo la tonificación y la ganancia muscular.
Para empezar abre bien las piernas y alarga los brazos hacia los costados. Gira el pie izquierdo hacia delante y desde aquí inhalando, alarga tu coronilla hacia el techo y exhalando lleva el brazo izquierdo hacia la izquierda. Cuando ya no puedas alargar más, ve bajando lentamente la mano izquierda hacia el suelo. Puedes utilizar un bloque o apoyo si todavía no puedes apoyarte en el suelo. Si tu mano llega al suelo, déjala apoyada por detrás del pie y lleva tu mirada hacia tu mano derecha que se quiere ir hacia el techo. Mantén cinco respiraciones.
Con la última exhalación, lleva la mano derecha a tu cadera derecha, lleva la mirada hacia el suelo y dobla tu rodilla izquierda. Coloca delante de ti, si lo necesitas, el bloque que has utilizado antes para apoyarte. Inhalando, alarga la pierna derecha hacia la pared. Si puedes lleva la mano izquierda al suelo y mantenla. Inhalando lleva el brazo derecho hacia el techo y si puedes la mirada hacia la mano derecha. Mantén durante cinco respiraciones y con la última exhalación vuelve a dar un gran paso con la pierna derecha hacia detrás. Inhalando estira la pierna izquierda y exhalando vuelve a juntar tus pies en medio de la esterilla.
Agradecimientos:
Xuan-Lan, Clotilde Amoroux y Mercedes de la Rosa
Solán de Cabras